Acerca de esta aplicación
NO LUGARESEn sus viajes antes y especialmente después de la pandemia, Roberto Lombana ha tenido este sentimiento relacionado con los no lugares. Un término acuñado por Mark Augé que hace referencia a aquellos espacios de tránsito que encontramos y a los que no prestamos demasiada atención cuando nos movemos de un lugar a otro.
Uno de esos espacios que llamó la atención de Robert fue el metro y las estaciones de metro. Su estética de diseño funcional y duradero responde a cada ciudad y cultura en particular que comunica los valores de una sociedad
en su momento histórico.
Por ejemplo, si comparamos un vagón de metro en Londres o Tokio, Medellín o
París, podemos apreciar cuatro visiones y expresiones estéticas diferentes que
corresponden a estas partes del mundo.
De vuelta a su sentimiento original, podría preguntarse, pero ¿por qué pinta estos
vagones de metro sin gente? Lombana siguió tomando fotos para hacer su
pinturas, mientras continuaba viajando, se preguntaba qué pasaría con estos espacios si hubiera un desastre natural, un evento nuclear como Fukuyama o el mundo se calentara unos grados. La gente no seguiría viniendo aquí para transitar de un lugar a otro. Estos no-espacios permanecerían vacíos. La premonición de Roberto se hizo realidad poco después. Cuando la humanidad sufrió la pandemia, estos espacios quedaron vacíos.
Este trabajo nos recuerda que a medida que nos movemos de un lugar a otro, hay un espacio que no es de nadie, y otros se encargan de diseñarlo y mantenerlo. Invaluable para la existencia humana, ya que sirve al propósito de conectarnos a todos.
Esta serie de pinturas son el resultado de una experiencia espacial y perceptiva mediada por la fotografía, convertida en lienzo de técnica mixta en un homenaje a Richard Estes que traduce la fotografía en pintura.
